por Pablo Rego | Cada 21 de junio se celebra el Día Internacional del Yoga, una fecha creada por las Naciones Unidas para reconocer el valor de esta práctica como camino hacia el bienestar integral.
Este año, en 2025, el lema es claro y profundo: “Una Tierra, Una Salud”.
Un mensaje que plantea que no puede haber salud real si no es compartida, si no incluye a toda la humanidad y a cada forma de vida en este planeta.
Lee el artículo completo. Al final de esta página, podrás ver el video completo sobre "El poderoso mensaje de Yoga para 2025"
El mundo en crisis: guerras, caos climático y desconexión
La humanidad atraviesa un momento crítico.
Conflictos armados, colapso ambiental, aumento del sufrimiento emocional…
Vivimos en un sistema que promueve la desconexión, la prisa, el individualismo.
Frente a este escenario, Yoga se revela como una herramienta de reconexión y transformación.
No solo del cuerpo, sino también del pensamiento, del vínculo con los demás y con la Tierra.
El cambio de era ya está en marcha
Estamos dejando atrás un ciclo dominado por estructuras rígidas, creencias impuestas y separación.
Entramos en una nueva etapa donde la fraternidad, la innovación, la expansión de la consciencia y la cooperación marcan el pulso de lo que viene.
Este tránsito no es sencillo. Las crisis son parte del proceso.
Pero también son señales de que un nuevo paradigma empieza a tomar forma, uno que necesita de nuestra participación activa.
Yoga como respuesta: elevar la vibración individual y colectiva
Yoga, en su esencia más profunda, es un camino de unión.
No solo entre cuerpo y mente, sino entre el individuo y el colectivo, entre el ser humano y el planeta.
Cada respiración consciente, cada momento de quietud, cada decisión tomada desde el centro, eleva la vibración interna y afecta al entorno.
Así, el cambio verdadero comienza en lo invisible: en la energía, en la intención, en la forma en que habitamos.
Una sola salud: sanar el vínculo con la Tierra
Cuando hablamos de una sola salud, hablamos de una visión integradora.
Lo que ocurre en el cuerpo ocurre también en el mundo.
No hay bienestar duradero si los ecosistemas están colapsados, si la violencia persiste, si el modelo de vida sigue siendo depredador.
Yoga es una forma de decir basta sin violencia.
De resistir desde la calma.
De actuar desde el amor y no desde el miedo.
Un nuevo paradigma es posible
Necesitamos prácticas que nos ayuden a reconectar con lo esencial.
Espacios para sanar juntos.
Y una forma de vivir que no se base en el dominio ni en la utilidad, sino en el respeto, la colaboración y la consciencia expandida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario